La vida es tiempo, no tiempo
cósmico imaginario, sino tiempo que se acaba, el verdadero tiempo, el tiempo
irreparable. Porque la vida es tiempo el hombre tiene edad. La edad es estar
como suele decirse, ser joven, maduro o anciano.
Esto significa que, todo
¨hoy¨ envuelve tres tiempos históricos distintos, tres ¨hoy¨ diferentes, los
cuales conviven trabados unos con otros, y , por fuerza, al ser diferentes, en
esencial hostilidad.
Eso, de que siendo tres
modos de vida distintos tengan que ser
el mismo ¨hoy¨, declara el dramatismo, el conflicto que constituye precisamente
el fondo de la materia histórica.
Hay que distinguir en
historia entre ¨coetaneidad¨ y
¨contemporaneidad¨.¨ todos somos ¨contemporáneos¨, vivimos en el mismo
tiempo cronológico. Solo se coincide con los ¨coetáneos¨. Los
contemporáneos no son coetáneos.
Conviven tres tiempos vitales distintos. Si todos los contemporáneos fuesen
coetáneos la historia se detendría anquilada, petrefacta, sin posibilidad de
innovación ninguna.
El conjunto de los que son
coetáneos constituyen una generación. El concepto de generación implica, tener
la misma ¨edad¨ y tener algún concepto vital. Edad histórica .La historia
necesita de una peculiar exactitud y cuando se quiere suplantar aquella con
esta se cae en errores. El concepto de ¨edad¨ no es substancia matemática sino
vital. La edad es una actitud vital, dentro de una ¨zona de fechas¨.
La edad histórica es una
vida con un comienzo y su término. Tienen la misma edad, históricamente, no sólo
los que nacen en un mismo año, sino los que nacen dentro de una zona de fechas.
El mundo vive en un mundo de convicciones comunes a todos los que conviven una
época determinada. Esta realidad, lo mismo que el hombre se encuentra con el
cuerpo que así se encuentra con los ideas de su tiempo y en ellas tiene que
vivir.
Cuando él cambia, cambia el
argumento de la vida individual. Tendremos que el ¨mundo vigente¨, es el factor
primordial de la historia, que cambia con toda generación. Las generaciones
cambian el mundo y éste al hombre individual. Las generaciones, sino una polémica, la vida de
cada generación consiste en pelearse con la anterior. La polémica tiene en
historia el carácter de secuencia, discipulado, colaboración y prolongación de
la generación anterior por la subsecuente.
Cada generación representa
un trozo intransferible e irreparable del tiempo histórico, pero se empalpa y
presenta secuencia con las otras . el presente en el cual estamos viviendo ,
porque sobre él gravitan los otros presentes, todas las otras generaciones.
Pero siendo como ha sido nuestra vida es tal cual , el pasado es presente,
somos su resumen. Nuestro presente está hecho con la materia de ese pasado el
cual pasado, por tanto, es actual.
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